Todo
son incógnitas en un Real Madrid en el que lo único confirmado
hasta el momento es que Florentino Pérez será su presidente cuatro
años más. El resto, desde el entrenador hasta qué jugadores
seguirán, está lleno de interrogantes. Y una de las decisiones prioritarias, una vez se sepa el entrenador, es resolver la salida de Higuaín
menos clara ahora de lo que se pensaba hace sólo unos días.
"Quiero
cambiar de aires, este fue mi último partido con el Real Madrid. Son
muchos años aquí y ojalá salga todo bien. Dejo muchas cosas aquí
porque fueron siete años. No fue una decisión fácil, el club ya lo
sabe", afirmó el argentino el 1 de junio, después del triunfo
4-2 ante Osasuna en la última jornada de la Liga. Higuaín marcó y
fue capitán en ese encuentro.
Estas
palabras, sobre todo la frase "el club ya lo sabe",
permitieron pensar en un futuro claro fuera del club. Pero no.
Porque Florentino
Pérez aseguró esta semana que se llevó una sorpresa al escuchar
las declaraciones de Higuaín e
insinuó que no han sentado bien. "A mí no me ha dicho que se
va. Hablaré con él, pero en este club el que se quiere ir ya sabe
lo que tiene que hacer: pagar la cláusula. No es fácil irse si no
quiere el club. No tenemos ninguna oferta por él", aseguró el
presidente blanco. Y la cláusula es de 250 millones de euros.
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